¿Por qué las asociaciones pueden hacer un mundo mejor?

¿Por qué las asociaciones pueden hacer un mundo mejor?

Las asociaciones son un claro ejemplo del poder que se puede ejercer y lo que se puede lograr como colectivo o suma de las partes, por encima de los intereses individuales de cada una.

Las Asociaciones demuestran, con hechos, que ayudan al desarrollo económico y social de los países. Así, y entre otros aspectos:

1.- Ayudan al desarrollo profesional de sus miembros. La formación es, a menudo, una función de las asociaciones y en muchos sectores la única fuente de educación continua. Gracias a este apoyo, permite que la fuerza de trabajo de muchos países siga siendo competitiva y experta en tendencias, técnicas y tecnología.

2.- Desempeñan un papel destacado en el establecimiento de normas, técnicas, códigos éticos y programas de certifcación profesional. Todos estos esfuerzos ayudan a reducir los riesgos que afrontamos como consumidores en el mercado, ahorrando a la vez dinero a los Estados al no tener que ocuparse de estas áreas de trabajo y muchos problemas de acuerdos internacionales de normalización.

3.- Las Asociaciones prestan a sus miembros la oportunidad de desarrollar y difundir información valiosa que no podría estar disponible de otro modo. Los gobiernos suelen llamar habitualmente a las asociaciones para conocer la información de su sector o área de actividad.

4.- A través de sus miembros flantrópicos las asociaciones proporcionan alivio en caso de, por ejemplo, desastres y catástrofes naturales construyendo viviendas para las personas sin hogar, 13 prestando servicios médicos de emergencia o proporcionando ayuda humanitaria.

En un mundo como el actual, donde la sostenibilidad del planeta pide acciones urgentes y consensuadas a nivel mundial, donde la igualdad de género es un pilar fundamental de desarrollo de la sociedad y donde lo humano debe ser el motor necesario de ese desarrollo frente a la robotización, las asociaciones pueden y deben desempeñar un papel de tracción más que de acompañamiento. Las asociaciones no solo pueden hacer un mundo mejor, sino que probablemente son las únicas que lo puedan hacer en los tiempos en que vivimos